Descripción
El cerezo es un árbol muy vigoroso y de copa redondeada o cónica que puede llegar a los 15m de altura. Sus ramas son gruesas y con muchos brotes cortos, que brotan anualmente y es dónde crecen las flores y frutos. Sus hojas son ovaladas, de hasta 15cm de longitud y muy aserradas. Sus flores son hermafroditas y de color blanco, y se generan en estructuras llamadas ramilletes de mayo, dónde crecerán varias flores. El fruto es casi esférico y de pulpa rojo oscuro, casi negra en estado de plena madurez.
La producción mundial de cerezas se sitúa en las 2.000.000 toneladas anuales. Los principales productores mundiales de cereza son Estados Unidos, Alemania, Italia, España, Grecia y Rusia. En España se cultivan unas 30.000 hectáreas, las cuales producen 100.000 toneladas aproximadamente. Las principales zonas de cultivo de la cereza son Extremadura, Aragón, Cataluña, Andalucía y Castilla y León.
Suelo
Prefiere los suelos profundos y sueltos, ya que si estos son pesados y demasiado húmedos pueden provocar asfixia radicular.
PH
Salinidad
Calidad
Temperatura
El cerezo tiene una alta capacidad de adaptación a diferentes suelos y climas, siempre que sea un clima con temperaturas templadas, pero con inviernos fríos. Aunque tiene altas necesidades de frío (800 horas frío) la flor es bastante sensible a heladas.
Riego
No tiene unas necesidades hídricas muy grandes, por lo que si se elige un patrón adecuado y el clima lo permite pueden ser cultivados en secano.
Propiedades de riego
Variedades
Las variedades de cerezo más conocidas son la Ambrunés, Burlat, Lapins, Pico Negro, Summit y Sunburst entre otras. Cada una de ellas tiene una fecha de cosecha diferente, por lo que esto permite tener cerezas en el mercado nacional desde finales de abril hasta julio. Entre las variedades más usadas para el cultivo industrial están la Napoleón y la Blanca de Provenza.
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