Descripción
El avellano es un arbusto vigoroso con un tamaño de 3 a 6m de altura y alta capacidad de producir rebrotes. Sus ramas son fuertes y flexibles, con hojas cordiformes, alternas y de 5 a 10cm de tamaño. El avellano es una planta monoica con flores unisexuales. Las flores masculinas generan una gran cantidad de polen. Las flores femeninas crecen de forma escalonada y son auto incompatibles, por lo que necesitan de polinización cruzada para fecundarse. Sus frutos son aquenios secos, con un pericarpio leñoso de forma esférica u oval de 1,5cm de diámetro.
La producción mundial de avellana es de unas 675.000 toneladas. Está principalmente situada en Turquía, con un 75% de la producción mundial. En España, el cultivo del avellano agrupa unas 13.500 hectáreas, en las cuales se producen unas 8.000 toneladas anuales.
Suelo
Se adapta correctamente a diferentes tipos de suelo, pero prefiere suelos francos, profundos y de pH entre 5,5 y 7,8. No tolera muy bien la salinidad. En suelos arcillosos pueden presentar problemas de asfixia radicular y clorosis. Por ese motivo, se recomienda tener unas parcelas con buen drenaje en el caso de cultivarse en esos suelos.
PH
Salinidad
Calidad
Temperatura
El avellano se adapta perfectamente al clima templado, con suficiente humedad en el verano y vientos moderados que ayuden a su polinización. En invierno necesita acumular 700 horas de frío para empezar bien su ciclo productivo.
Riego
Su requerimiento hídrico se sitúa en los 700-800mm de agua anuales. Sus mayores necesidades de agua son durante la época de fecundación, inducción floral y formación del grano. El avellano tiene un sistema radicular superficial que no es muy extenso.
Propiedades de riego
Variedades
Las variedades de avellano más usadas en España son la Negret (80% de la superficie plantada), la Pauetet y la Tonda Giffoni. En este cultivo no se necesita usar patrones, ya que la multiplicación del cultivo se hace por rebrotes.
Otros cultivos similares